Este primero de enero entró en vigor la nueva ley irlandesa que tipifica la blasfemia como un delito castigable con multas de hasta 25.000€. Se prevee también, en caso apropiado, la censura y retirada del material blasfemo.
En el texto de la ley, se define como blasfemia aquella declaración, o obra, que insulte o ridiculice todo aquello considerado sagrado por alguna religión, y que consiga o pretenda con ello la indignación de un gran número de creyentes.
Según esta ley, por ejemplo, se podría multar a los dibujantes Daneses que hicieron la famosa caricatura del profeta Mahoma que indignó a tantos miles de musulmanes. Leve pena a sumar al precio que han puesto a sus cabezas ciertos movimientos fundamentalistas, y los intentos de asesinato que han sufrido, como el del pasado viernes en el propio domicilio.
Como cuenta Atheists Ireland, con esta ley en la mano (y saltándonos el principio de no retroactividad, claro), podríamos multar a Jesucristo, Mahoma, Mark Twain, Benedicto XVI y una larga lista más.
No creo que sea ese el camino a seguir en la Europa laica de las libertades.
2 comentarios:
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pues no, no es el camino...como en casi todo, soy defensor del témino medio. Que la religión es una expresión de la espiritualidad innata del humano, es algo indiscutible. Pero el sentido del humor tambien es algo innato, asi que deben y pueden coexistir, en tanto en cuanto ninguna de las dos tendencias nos lleven al mal gusto...y eso no puede dictarlo una ley, sino que siempre es algo subjetivo...no se hasta que punto alguien puede llegar a indignarse, pero prohibir nunca funcionó...
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