A finales del año pasado la British Humanist Asociation comenzó a recaudar dinero para poder colocar el eslogan "There’s probably no God. Now stop worrying and enjoy your life." sobre buses urbanos y en anuncios en el metro. La frase fue propuesta por Ariane Sherine (la de la foto), indignada tras leer sobre un bus urbano un anuncio religioso que amenazaba a los no creyentes a la tortura eterna del infierno. Desde entonces la campaña ha sido copiada en varios puntos de Europa, incluyendo Madrid y Barcelona.
Yo, personalmente apoyo la iniciativa por varias razones:
Favorece la visibilidad de la comunidad atea/agnóstica. Que la visibilidad promueve la aceptación es algo que ya se ha comprobado con los colectivos de gays y lesbianas.
Está teniendo mucho éxito en la organización de los ateos/agnósticos. Esto puede que no sea muy importante en Europa Occidental, donde es raro encontrar casos de discriminación contra este colectivo. Sin embargo puede que sea necesario en casi todo el resto del mundo. Recordemos que existen países en los que el ateismo o la blasfemia se castigan con la muerte.
Es respetuosa y positiva, dice simplemente que existe la posibilidad de que no haya Dios en vez de negar categoricamente su existencia. Esto, claro está, lo hace más exacto, ya que no podemos demostrar la inexistencia de Dios.
Finalmente, lleva un debate muy interesante a la calle. En una sociedad donde la mayoría de la gente es "religiosa no practicante" y está más preocupada de las series de la tele de lo que está pasando en el mundo, provocar que se discutan asuntos como éste es beneficioso.
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